El estilo actual por excelencia: el estilo mediterráneo
El estilo mediterráneo es una de las tendencias más atemporales en el mundo del interiorismo, destacando por su simplicidad y conexión con la naturaleza. Este estilo surge de en las costas del sur de Europa, y evoca una sensación de bienestar y calma. Esa calma que nos encontramos cuando estamos de vacaciones la queremos transportar al día a día en nuestro hogar. Este estilo combina elementos tradicionales con una estética relajada, creando espacios luminosos y acogedores.
La característica principal de este estilo es la paleta de colores: el blanco, azul y tonos terrosos predominan, evocando el mar, el cielo y la tierra, combinados con materiales naturales como la madera o el lino.
Vivienda en Mykonos - Grecia
Un ejemplo icónico de esta combinación lo encontramos en las casas de las Islas Griegas, como Mykonos, donde las fachadas blancas se contrastan con puertas y ventanas en azul. Este contraste, además de estético, tiene una funcionalidad práctica, ya que el blanco refleja el calor y mantiene el interior fresco, mientras que el azul añade un toque de frescura visual.
En cuanto a los materiales, la madera rústica, la piedra natural y el barro son elementos recurrentes. Estos materiales aportan una conexión orgánica con el entorno y una textura que añade calidez a los espacios. Los suelos de terracota serán frecuentes en hogares mediterráneos, que además de ser duraderos, proporcionan una sensación acogedora. A esto se suman muebles y elementos decorativos de madera envejecida o de aspecto desgastado. Las vigas de madera en techos altos también son un detalle clásico que añade profundidad y una sensación de amplitud.
La vegetación también juega un rol esencial en el estilo mediterráneo. El uso de plantas típicas de la región, como olivos, lavanda o incluso pequeñas macetas de hierbas aromáticas conectan el interior con el exterior. Incorporar plantas de manera estratégica en el diseño del hogar refuerza esa sensación de estar siempre cerca de la naturaleza.
Otro elemento significativo es la importancia del espacio exterior. Las terrazas y patios de estas zonas se convierten en extensiones del hogar, ya que se puede disfrutar del buen clima y la vida al aire libre. Espacios con muebles cómodos, suelos de piedra y vistas a paisajes naturales o urbanos logran transmitir esa sensación de serenidad que caracteriza al estilo mediterráneo.
El estilo mediterráneo es mucho más que una tendencia decorativa. Es un modo de vida que busca integrar el entorno natural en el espacio habitable, creando un equilibrio entre la funcionalidad y la belleza. Es un estilo ideal para aquellos que valoran la simplicidad, la calma y el encanto de lo artesanal, donde cada detalle cuenta para crear un ambiente que invita a relajarse y disfrutar de los pequeños placeres de la vida.
